Autorretrato

 

HELIOS GÓMEZ

 

Helios Gómez Rodríguez (Sevilla, 1905-Barcelona 1956), conocido popularmente también como el “artista de corbata roja”, fue un sindicalista anti-franquista, pintor, cartelista y poeta español. Fue representante del movimiento vanguardista de principios del siglo XX y contertulio de otros artistas de la época como Luis Buñuel, Salvador Dalí y Federico García Lorca. Parte de su obra se ha expuesto en el Museo Reina Sofía de Madrid

 

Helios Gómez nació en el barrio de Triana (Sevilla), del que siempre hizo profesión al igual que de su pueblo gitano. Realizó sus primeros estudios en la Escuela Industrial de Artes y Oficios de Sevilla, aprendiendo el oficio de decorador de cerámica; trabajando como ayudante de pintor en la fábrica de la Cartuja y asistiendo a los cursos nocturnos de Bellas Artes.

En 1923 se une a CNT, publicando sus primeros trabajos en Páginas Libres. En 1925 expone por primera vez en el café Kursaal obras de carácter cubista, criticadas por la tradicional sociedad andaluza del momento. Esta exposición fue trasladada al Ateneo de Madrid y a la Galería Dalmau de Barcelona, con mucha mejor acogida.

 

Alianza obrera



Sus opiniones libertarias le llevan a participar en las revueltas del momento, viéndose obligado a exiliarse a París en 1927, desde donde comienza un periplo por distintas ciudades europeas, tras ser expulsado por participar en las manifestaciones de repulsa contra las ejecuciones de Sacco y Vanzetti. Se afinca primeramente en Bruselas do

nde ilustra el libro Rien qu’un homme de Max Deauville. Pasa por Ámsterdam, Viena y dos meses en la URSS. En 1929 estudia tipografía e interiorismo en Berlín y en 1930 la AIT publica en Berlín su primer álbum Días de Ira.

Después de la dictadura de Primo de Rivera vuelve a Barcelona en la que colabora en los diarios L’Opinió, La Rambla, La Batalla, L’Hora, Bolivar, Estudios y Nueva España, con diversas portadas e ilustraciones. En 1930 publica el manifiesto Porqué me marcho del anarquismo e ingresa en la Federació Comunista Catalano-Balear, apuntándose al Bloc Obrer i Camperol (Bloque Obrero y Campesino).

Al proclamarse la Segunda República Española participa en el asalto a la Cárcel de Mujeres de Barcelona. Se traslada a Madrid y se afilia al PCE, colaborando en la revista Mundo Obrero. Fue detenido en 1931 por su militancia en el partido y encarcelado en Madrid; más tarde trasladado a Jaén, desde donde viaja a Bruselas al conseguir la libertad provisional. De allí marcha a Moscú, invitado como representante español al Congreso Internacional de Artistas Proletarios con motivo del 25 aniversario de la URSS. De este viaje, él mismo escribió posteriormente en su poema Erika una autocrítica ideológica en ese período, mucho más cercana al individualismo radical del ideólogo anarquista Max Stirner, que al colectivismo intelectual de los comunistas: “¡Volar! ¡Crear! aunque la creación no puede ser colectiva, Erika: es siempre individual. El conjunto puede sólo ampliar, cooperar en la tarea. Ése es el destino de la colectividad, secundar el pensamiento libre, inquisitivo del individuo. ¡El tesoro más valioso de la humanidad!”

En 1933 expone en el Museo Pushkin de Moscú y edita su 2º álbum Revolución española. En 1934 regresa a Barcelona en donde es detenido al participar en la Revolución de 1934 e ingresado en un buque prisión. Durante su estancia en el mismo, realizará su tercer álbum, Viva Octubre, publicado en 1935 y dedicado a estos hechos.

 

Monjes trabucaires

 


Guerra civil

En 1935 funda en Barcelona Els Sis. En la primavera de 1936, profesionales gráficos se reunieron en L’Ateneu Enciclopèdic Popular para crear un sindicato de dibujantes y adherirse al Sindicato de Artes Gráficas, constituyéndose la Junta directiva y siendo Helios Gómez elegido presidente. Se llamó Sindicato de Dibujantes Profesionales, dedicándose al cartelismo para grupos republicanos y anarquistas. Lucha en las barricadas de la defensa de Barcelona y entra a formar parte de la Alianza de Intelectuales Antifascistas de Cataluña.

Es nombrado comisario político de la UGT y se encarga de organizar la columna Ramón Casanellas. Se embarca con la Expedición Bayo para liberar a Ibiza y Mallorca e interviene en los frentes de Aragón, Madrid y Andalucía. Es acusado de matar a un capitán de su propio bando, al aplicar una medida disciplinaria exagerada; y se traslada a Madrid para evitar represalias. Es expulsado del PSUC en plena Guerra Civil, en 1937, y perseguido por los estalinistas, que lo acusan de trotskista y libertario. Retorna a su antigua militancia anarquista en la CNT. En 1939 es nombrado Miliciano de Cultura de la 26 División, antigua Columna Durruti y se encarga de la dirección y maquetación del diario portavoz de dicha columna, El Frente, y de la organización en Barcelona del acto de homenaje a Durruti.

 

Tortura

 


Posguerra

Después de la derrota, pasó por diversos Campos de concentración en Francia y Argelia, entre ellos el de Vernet d’Ariège donde se relaciona con Max Aub, desde febrero de 1939 a mayo de 1941. Es liberado y se traslada a Francia donde conoce a Mercedes Planas, madre de su único hijo, Gabriel. No puede dar por terminada la lucha y pasa a Barcelona, donde crea el efímero grupo Liberación Nacional Republicana en 1944, a la vez que funda la Casa de Andalucía, curiosamente junto con un militar español. Un año más tarde es detenido y pasa 5 meses en prisión. Expone en la Galería Arnaiz, en 1948, obras de carácter surrealista y realiza los murales del Jazz Colón y de la Residencia Sant Jaume de Barcelona.

Vuelto a detener por una oscura causa de asociación ilegal, es nuevamente ingresado en prisión; donde pinta una celda, la primera del corredor de los condenados a muerte: la llamada Capilla Gitana. Estos dibujos muestran a unos personajes de rasgos gitanos, con ángeles negros, según la canción de moda de la época, el bolero de Antonio Machín. Muy discutida por las autoridades penitenciarias del momento, por su transgresora factura; resistió hasta 1996, en que fue blanqueada; aunque posteriormente ha podido recuperarse.

La obra de Helios Gómez estuvo toda su vida al servicio de la revolución y el obrero, pero con un estilo innovador y vanguardista. Su desgarradora visión de la explotación obrera y del sitio del artista en el concepto de la lucha de clases, le llevó a pintar y escribir una de las más personales páginas del arte de nuestro país. Permanece en prisión hasta 1954, a pesar de existir una orden de liberación desde 1950. El 19 de septiembre de 1956 muere en Barcelona.

 

Aparecido en Contramarcha nº 64

Septiembre 2013

 

 

 

ÁGORA