Era cervantina

AÑO QUINIENTOS DE LA ERA CERVANTINA

Este año es el número cuatrocientos de la publicación de «El Quijote», una de las obras más vendidas y, sin embargo, menos leídas de la literatura. A continuación reproducimos un extracto de un artículo de Manuel Vázquez Montalbán, que nos dejó el año pasado y a quién seguimos echando de menos.
"Si Cervantes no hubiera sido manco, ni hubiera perdido tantas cosas, probablemente jamás se habría metido en la piel de Don Quijote, ni habría arrastrado a Sancho al mal camino de la utopía. Sólo a un derrotado se le ocurre convertir la derrota en victoria moral y traspasar esa voluntad de moralidad al ser más desvalidamente cínico de este mundo, el pobre Sancho, el hombre del pueblo que siempre escarmienta en cabeza propia.
De todo lo dicho por cervantistas y demás ralea, hay que quedarse con esa inversión de papeles final, en la que Don Quijote pide tregua y árnica y en cambio Sancho pide guerra contra los molinos, curado de su escepticismo, no se sabe bien si por entusiasmo moral o por la compasión que siente ante la bondad perdedora de Don Quijote.
Es falso que cada época cree su criterio de la justicia y de la libertad. Cada época crea diferentes instrumentos para impedirlas y conseguirlas, pero la aspiración humana de justicia y libertad nace con la existencia misma del despotismo del fuerte y la dependencia del débil.
Don Quijote y Sancho encarnan la tensión entre la realidad y el deseo, el miedo y la esperanza, contrarios que se necesitan mutuamente, que se dan sentido el uno al otro. Cuando Sancho propone a Don Quijote continuar la aventura es porque teme y sabe que si Don Quijote no existiera también él dejaría de existir."

El escriba sentado. Ed. Crítica, 1997

Aparecido en Contramarcha Nº 26

Enero 2005

 

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