¿Qué es la Coordinadora Rojinegra?
La Coordinadora Rojinegra Europea es una organización que integra diversas formaciones anarcosindicalistas establecidas en varios estados del ámbito europeo. Nació con el ánimo de establecer un cauce de información común que sirviera para transmitir las inquietudes y los conflictos que se generan en los países donde estas organizaciones están implantadas y, de esta manera, poder crear estrategias comunes y apoyar, solidariamente, las acciones locales llevadas a cabo por cualquiera de los miembros integrantes.
Esta coordinadora cursó una invitación a Solidaridad Obrera para que asistiéramos, en calidad de observadores, a su reunión anual que tuvo lugar los días 10, 11 y 12 del pasado mes septiembre en la localidad de Manzano, cerca de Udine, en el Nordeste de Italia, cerca de la frontera eslovena.
Desarrollo de la reunión
A esa reunión asistieron delegados de los sindicatos: USI, (Italia), – anfitriones del evento-, CGT. (España), CNT-F (Francia), SAC (Suecia), ESE (Grecia) e IP (Polonia). A los que se sumaron, por primera vez, los tres delegados de Solidaridad Obrera. La IWW (Gran Bretaña), perteneciente también a la coordinadora no pudo, esta vez, enviar delegados.
Durante la reunión se trataron distintos aspectos organizativos y estructurales relativos al funcionamiento de la organización y se establecieron mecanismos que permitiesen promover y facilitar la implantación de organizaciones que asumieran los principios fundamentales del anarcosindicalismo. Se acordó enviar delegaciones allí donde las organizaciones hermanas existentes necesitaran información y ayuda.
Asimismo se impulsaron una serie de proyectos comunes encaminados a la coordinación de las luchas obreras en los distintos estados, fortaleciendo los cauces de información para que las luchas promovidas por cualquiera de los miembros integrantes de la organización, tuvieran el eco necesario y pudieran recabar el apoyo internacional.
De igual manera se acordó apoyar las justas luchas que se llevan a cabo en otros países fuera del espacio europeo. Como la que llevan a cabo los trabajadores de la OCP de Marruecos (Empresa estatal, propiedad de la familia real, que se dedica a la explotación de los fosfatos) donde han sido despedidos 850 trabajadores por no firmar los nuevos contratos basura que querían imponerles y por organizarse sindicalmente.
Al final de la reunión de las delegaciones se organizó un debate abierto y público dónde se intercambiaron experiencias de las luchas mantenidas por distintos colectivos para analizar las estrategias empleadas y los resultados obtenidos.
Resultó sorprendente constatar la cantidad de recursos que se pueden emplear como elementos de lucha en función del marco legal y social de cada país. Especialmente llamativo fue el caso de los trabajadores suecos de un hotel que consiguieron sus reivindicaciones formando una barrera humana en la puerta donde se informaba a los clientes que se aproximaban del conflicto que existía invitándoles a buscar un alojamiento alternativo.
En cualquier caso los elementos que se perfilaron como esenciales para la consecución del éxito en cualquier lucha son la organización y la determinación.
Acuerdo de integración
A la vuelta los delegados de Solidaridad Obrera informaron en las asambleas de las distintas federaciones de los fines y funcionamiento de la coordinadora. Así como de los acuerdos que se habían alcanzado y de los compromisos que asumían las organizaciones integrantes. Se abrieron debates donde se analizaron los pros y contras que conllevaría la integración y al final se decidió nuestra integración como miembros de pleno derecho.
La razón objetiva que primó a la hora de decidir nuestra integración en la coordinadora ha sido clara: Pensamos que en un mundo globalizado y, sobre todo, en una Europa común, donde se están aplicando generalizadamente recortes a los derechos de los trabajadores siguiendo ciegamente las pautas inflexibles y antisociales, marcadas por la oligarquía que controla los mercados financieros, es necesario organizar una respuesta común a los retos que se nos plantean.
En este sentido creemos que la Coordinadora Rojinegra es un instrumento eficaz porque posibilita el intercambio de estrategias ante ataques que, comenzando en un determinado estado, terminan extendiéndose por al resto.
Además consideramos que es un vehículo de la solidaridad entre los trabajadores de los distintos países al fomentar el apoyo a las luchas que se llevan a cabo en diversos rincones del Continente
Si el capital está globalizado y coordinado, nosotros también deberíamos estar. Ante ataques globales respuestas globales.
Solidaridad Internacional