El 24 de mayo, viernes, realizamos la última movilización unitaria aprobada en asamblea general, huelga de cuatro horas por turno y concentración ante el Ministerio de Sanidad. Ese mismo día la Federación de UGT nombró una Gestora a cargo de la Sección Sindical.
La semana siguiente hubo varias reuniones entre todos los sindicatos para ver como gestionábamos el acuerdo de la asamblea general, teníamos que ponernos en contacto con las empresas ferroviarias que alcanzásemos para organizar una movilización mensual contra el envenenamiento por amianto. La nueva situación en UGT generó varias reuniones y la convocatoria de un Pleno del Comité de Empresa que se celebró el 14 de junio y que sustituyó a los delegados de prevención de ese sindicato.
A la semana siguiente y en varias reuniones posteriores se volvió a tratar el acuerdo de asamblea general, acordándose que deberíamos contar con las respuestas de las empresas ferroviarias que no llegaban (CAF, Metros y Renfe). Lo que si nos llegó fue la decisión en asamblea general de los trabajadores y trabajadoras de Metro de Barcelona, única empresa que se había movilizado junto a nosotros el 24 de mayo. En esa asamblea decidieron dar 100 días de cortesía al “nuevo” Ayuntamiento de Barcelona (que gestiona TMB -Metro y EMT-) y recuperar las relaciones laborales.
Ante ello se habló por nuestra parte, y ante todos los sindicatos incluido el SLMM, de convocar nueva asamblea general para exponer como estaban las cosas y tomar las decisiones que estimásemos mejor. Hasta ahora el SLMM nada ha dicho sobre esto, ni tampoco sobre ninguna otra cosa. Porque ni se ha dirigido a ninguna organización sindical del sector ferroviario, ni ha dado paso alguno en pro de llevar adelante el acuerdo de la última asamblea. El SLMM solo hace victimismo sindical, “todos los demás son malos”, “nosotros somos baratos y buenos”. Es una estrategia que en el terreno político ha dado réditos electorales a Ciudadanos y que piensa el SLMM que, de cara a las próximas elecciones sindicales, también se lo dará a ellos, llevándoles a ser los Arrimadas y Rivera del Metro. La semilla de la Dirección (aviso SO 50/2019) ha crecido en estas semanas y ya es cizaña. De ahí sus divisores avisos sindicales que solo tienen quejas de todos los demás sindicatos, que es de quienes esperan las soluciones, como siempre, mientras ellos, pobres víctimas, siguen tumbados a la bartola: Basta ver sus avisos de los Plenos del Cté. de Seguridad y Salud que hablan de todos los temas que llevamos los demás sindicatos como si ellos hubieran hecho algo, o las convocatorias de huelga de los últimos años, en las que no convocan para no pagarlas a sus afiliadxs, tal como cacarean y no hacen.
Desde Solidaridad Obrera proponemos al resto de sindicatos convocar Asamblea General para activar las movilizaciones en septiembre, repartiendo octavillas informativas durante estas semanas a los usuarios, llamándoles a defender el transporte público participando en la Manifestación en defensa del Transporte Público. Del SLMM no esperamos más que palos en las ruedas, pues siempre han sido una rémora ante cualquier propuesta, ante cualquier movilización. Las elecciones sindicales llegarán y pondrán a cada uno en su sitio, pero hasta que eso suceda el 13 de noviembre nos tememos que seguiremos leyendo lloriqueos artificiales, sin contenido alguno, para instigar la división y enfrentamiento entre trabajadores y organizaciones sindicales.
O LUCHAMOS, O PERDEMOS
¡ORGANÍZATE PARA VENCER!
Madrid, 8 de julio de 2019
Por Solidaridad Obrera