El lunes, Solidaridad Obrera fue convocada para conocer al nuevo jefe del Área de Prevención y Salud Laboral, con un currículum extenso, nos pintó un mundo maravilloso, en el que cada parte de la empresa es conocedora, y responsable, de sus obligaciones preventivas. Eso sí, el poco rato que le dejaron hablar la jefa de la División de Recursos Humanos, y a su querido secuaz, el jefe del Servicio de Prevención, que parecían traer algún plan. Este “gran plan de batalla” consistió en convertir dicha reunión en otro Pleno de Salud, en donde se dedican a hablar de cosas muy serias con ningún argumento, esperando que el tiempo y la verborrea solucionen aquello de lo que no saben. Como en cualquier Pleno, hubo que callarles la boca con argumentos preventivos, con resoluciones de la Inspección, o simplemente con el sentido común más básico, y evidente. Creemos, o deseamos, haber visto a este nuevo trabajador de la compañía, tomando buena nota de cada tema y de nuestros argumentos, pues lo esperamos que así sea.
El inmovilismo y bloqueo de todos los foros preventivos fue discutido con intensidad, teniendo al nuevo jefe de Área como espectador, en la que estos dos “preventivistas” exigían cambios de tono, limitaciones al número de asuntos, reuniones por correo y más agilidad. Hubo que, primero traducirles, y luego contestarles, la traducción simple, “nos molestáis, demasiado, con vuestras exigencias de protección frente a los riesgos y la salud”, la contestación de Solidaridad Obrera fue aún más simple y directa, “no nos importa, ni respetamos, la opinión de quienes nos exponen a los riesgos, nos amenazan y nos mienten”. Según su opinión debemos ser amables, sonrientes, educaditos, formales, e incluso estar de acuerdo, con cada una de las actuaciones que hacen, o se niegan a hacer, incluso con aquellas que, por su gravedad, tienen implicaciones penales.
Aún así, algo se pudo hablar, nos aseguró que, en su opinión, la mayoría de temas que llevan anclados en el Comité de Seguridad y Salud, no deberían, ni si quiera llegar a este foro, habiéndose solucionado mucho antes. Insistió en la necesidad de una comunicación fluida, preferentemente por teléfono, por su agilidad e inmediatez, a esto, debido a tantas y tantas conversaciones que “vuelan”, le indicamos que así lo haríamos, con documento por escrito, anterior o posterior, que en Metro de Madrid siempre ha habido demasiado “aire”. Otro de los puntos, recayó sobre el papel de el Área de Prevención en esta compañía, haciendo siempre de representantes de la empresa, siendo esta una posición bastante irregular, que impide cualquier independencia del Área que más la necesita, por su papel en la protección de los trabajadores.
En Solidaridad Obrera somos escépticos, pues sabemos muy bien todo aquello que está por hacer, todo aquello que se hace mal, todas aquellas actitudes contra-preventivas de mandos intermedios que son defendidas, premiadas y animadas por sus superiores, incluso en los Plenos de Salud. Hay tantísimo por hacer y tan malos vicios en esta compañía, que solo podemos esperar un criterio firme, externo a este circo de empresa, que nos ayude a proteger a nuestr@s compañer@s. De no ser así, tendremos otra marioneta más, otro maniquí, que alega cumplir ordenes mientras juega con vidas humanas, argumentos estos muy usados en los juicios de Núrenberg.
Por último, expresar nuestro absoluto compromiso con la prevención de riesgos y la salud de los trabajadores de esta empresa, sin rollos, sin mentiras, sin política y, en la mayoría de las ocasiones, a nuestro pesar, sin Metro de Madrid. Señor jefe de Área, elija barco y elíjalo bien, si está por la prevención, estamos aquí, dispuestos a remar, a soltar las jarcias y colocar las velas: a proteger a los trabajadores de maneras eficientes y, a ser posible, ecológicas. Si, decide subirse al barco equivocado, seremos, como nos ha tocado ser hasta ahora, los peores corsarios que haya conocido, atacando cada mentira, contestando cada cañonazo contra los trabajadores y procurando no dejar ninguna vía de huida, solicitando refuerzos a cuantos organismos o jueces sea necesario.
Madrid, 17 de julio de 2020
Por Solidaridad Obrera
LA JUNTA SINDICAL