El pasado jueves 21 de enero se trató de hablar de los distintos colectivos del Área de la Operativa y del Puesto de Mando. La reunión convocada de un día para otro, fue una absoluta pérdida de tiempo (qué raro en estos tiempos), ya que la Dirección de Metro sigue sin escuchar las razones por las que decimos un NO ROTUNDO al agente único, un no innegociable para Solidaridad Obrera, y que parece que no quieren entender por más veces que se lo expliquemos.
Tras nuestro nuevo rechazo a sus pretensiones de desprofesionalizar y de destruir empleo, no fueron capaces de hablar de ningún otro colectivo de todos los que componen el Área de Operación, dando la impresión de que el resto de trabajadores de este Área no les importa.
También tuvo lugar una reunión con los responsables de Puesto Central, donde pretenden instaurar otro engendro para la categoría de Auxiliar Técnico de Movimiento, modificando cuanto sea necesario en pro de la unificación, sin dar nada a cambio y sin llamarlo por su nombre, reestructuración.
En cuanto a los inspectores, ofrecen menos personal en festivos y un nuevo sistema de petición de PAP. No sabemos muy bien si esto es para dar respuesta al requerimiento de la Inspección de Trabajo, o para abordar una negociación que resuelva los problemas de estos compañeros y compañeras, facilitando su conciliación de la vida laboral y familiar. Sorprendentemente y, según manifestaron el jefe de servicio y el jefe de área del Puesto de Mando, la rapidez de la convocatoria les sorprendió tanto que no trajeron absolutamente nada, como si las cosas se pudieran preparar de un día para otro, demostrando la poca previsión que tienen. El Puesto de Mando de la Vergüenza o en lo sucesivo el PMV, es otro proyecto de siglas tontas e inventos infructuosos, en los que parece no tener cabida la creación de empleo, ni las mejoras de las condiciones de trabajo de los y las trabajadoras que allí prestan servicio.
La tiranía y el despotismo de la jefa de área de la operativa, disfrazada de alma cándida, por fin ha salido a relucir, esta miembro legal del Comité de Seguridad y Salud que hace dejación sistemática de sus funciones al no estar presente en absolutamente ninguno de los plenos desde hace años, ahora está centrada en su plan maestro de destrucción sistemático de empleo a medio y largo plazo, tal vez el más ambicioso en años. Además, ignoran los verdaderos problemas de los y las trabajadoras de esta empresa, los cuales llevamos muchos años poniendo de manifiesto.
Para Solidaridad Obrera, el nuevo modelo de unificación supone una flexibilización total, una desprofesionalización y un claro empeoramiento de las condiciones de trabajo, donde la gestión por líneas serían en mayor medida cortijos privados, lo que permitiría, aún más, una política de arbitrariedad y despotismo, y que modificarían, a peor, condiciones y costumbres, por ejemplo, limitaría muchísimos las posibilidades de cambio de servicio o de días libres con los compañeros, sin olvidar la ya mencionada y gravísima destrucción de puestos de trabajo.