Comienza el pleno tratando la pandemia vigente, hablando sobre las vacunaciones a lxs compañerxs que se van a Perú, y que siendo una iniciativa correcta ha sido ejecutada con ocultación y alevosía. El área de Prevención y Salud Laboral nos comunica que ya tienen un plan de vacunación para todxs lxs trabajadorxs de la compañía, que se completaría en menos de 10 días, eso sí, cuando volvamos a ser trabajadorxs esenciales según la CAM: cuando haya otra pandemia, catástrofe natural o cuando queramos disfrutar de algún derecho, como el de huelga. Sobre las mascarillas FFP2 (Talla S), se nos comunicó que al fin se encuentran homologadas y en matrícula, solo han pasado diez meses desde que Solidaridad Obrera solicitó este EPI. Ahora es derecho y obligación de cada compañerx comunicar la necesidad de su uso, principalmente para aquellxs que las actuales les tapen media cara, dejando multitud de huecos mal sellados.
Una vez más, como durante los últimos seis años, Metro vuelve a ignorar la necesidad del trabajo de los maniobras, asegurando que no deben revisar nada, desplazando cualquier responsabilidad sobre una avería a Mantenimiento de Material Móvil. Solidaridad Obrera dejó claro que serán estas actas las que se presenten cuando matemos a un viajero por fallar un tirador de emergencia que no se ha comprobado en más de un mes.
Ante el conato de accidente mortal en Quintana, tras recuperar tensión incumpliendo el protocolo vigente, y las tácticas de ocultación puestas en marcha por esta empresa; nos indican que no fue para tanto, y que fue un problema de comunicación. No, no nos equivoquemos, fue un problema de obediencia ciega, lo que se premia (sistemáticamente) en esta empresa. Gracias a que no sucedió nada, si no tendíamos uno o varios muertos, un jefe diciendo que el no dijo nada y un agente siendo imputado por incumplir el protocolo. Esta empresa de amiguetes, incompetentes y favores, sabe lo que hace cuando premia a pelotas y súbditos, lo que no es capaz es de ver es el riesgo. Quizás leer sobre los juicios de Nuremberg…
Solidaridad Obrera exigió la creación de un protocolo contra el acoso en todas sus variantes. Nos aseguraron que se creará, pero fuera de este Comité, pero con derecho a ser informado y consultado. No es por pensar mal, pero ya veremos los resultados.
Nos muestran los resultados de los estudios y trabajos desarrollados contra las partículas en suspensión de Estadio Olímpico. Parece que empiezan a trabajar en solucionar este problema, esperemos que este camino siga hasta solucionar el problema de una vez.
Volvimos a tratar el tema de los Equipos de Protección Individual (EPI) y de la ropa laboral, tanto de trabajo como de uniformidad. En materia de EPI se solicitó la creación de un listado de tallas por agente, las explicaciones sobre su traslado durante la jornada (pues algunos colectivos tienen decenas) y se consultó sobre las pruebas de los nuevos calzados de seguridad. Así mismo se solicitó que cada agente pueda elegir entre bota y zapato, pues ninguno aporta más protección que el otro, siendo una cuestión de comodidad o preferencia personal. Lo mismo se trató sobre los calzados homologados, pues poder elegir entre los homologados ahorraría problemas en los pies.
Sobre la ropa de trabajo, dado que parecían ignorados los requerimiento y normas EN, UNE, se solicitaron aclaraciones. Desde prevención aseguran que pretenden no informar de estas solicitudes de la parte social a la empresa técnica, para así permitirles trabajar sin condicionamientos ni sesgos. También declararon que su intención es que una vez acabe esta empresa, se creará una mesa técnica con nosotrxs, y que ahí será donde se definan las características finales, incluyendo todas las normas y especificaciones que se consideren apropiadas. Si las cosas suceden de esta manera, ni tan mal.
De la uniformidad, una vez demostrado que en ningún caso se tuvo en cuenta el confort de los agentes, se volvió a exigir la inclusión de estas características. Nos replicaron con dulces palabras, que no sabemos si lo tendrán en cuenta, pero seguiremos encima. Así mismo, se solicitó la documentación técnica del calzado, para intentar mejorar este aspecto también.
Ventas volvió a tratarse en este Comité, pues no se pueden hacer instalaciones “a la me cagüen diez” y pretender que no pasa nada. Después de la cantidad de dinero que se ha tirado en estas instalaciones, lo mínimo sería creer que están en buen estado, pero nada más lejos de la realidad. Desde “salidas de emergencia” que te dejan encerrado, hasta luces estroboscópicas, pasando por zonas que acumulan tanta agua que requieren de socorrista o talleres sin lavamanos, ni lavaojos, pese al uso de productos químicos. Por no meternos en lo relacionado con la circulación de vehículos, pues un único carril parecería un absurdo grave, pero no es nada comparado con una rampa en que vehículo sí, vehículo también, golpea; cualquier día vuelca un camión y tenemos una desgracia. Para ayudar a la circulación esta empresa decidió instalar unas vallas que solo remarcan lo insuficiente del único carril que existe.
Ante la exigencia de Solidaridad Obrera de realizar una nueva evaluación de riesgos de los fosos de trabajo vía, la empresa nos convocó a una reunión previa a este Comité. En dicha reunión se acordaron los pormenores de dicha evaluación, y quedo clara la necesidad de ir adoptando medidas para evitar las evidentes cargas musculoesqueléticas de lxs trabajadorxs.
Otro de los melones abiertos por este sindicato fue la investigación por sobresfuerzos en Talleres Centrales, cuando finalice exigiremos las medidas necesarias para hacer este lugar de trabajo menos lesivo.